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jueves, noviembre 03, 2005

Dimension del amor

Me preparaba para entrar en profundo estado anestésico, cuando me colocaron un tapón con un agujero en la boca. Comenzaron a introducir el endoscopio.
La anestesia no habría logrado el efecto al 100 por ciento por lo que estaba semiconsciente y empece a sentir el objeto deslizándose por mi esófago. Entré en estado de pánico, pero recordando que todos son sucios trucos de la mente, recordé que cuando tenia ansiedad o depresión, mi mama me recordaba que soy dueña de mi mente, y que nada tiene que disturbarla, que cuando tuviera sensación de pánico, me concentrara en la "dimension del amor".
Fue entonces que, mientras sentía que me ahogaba y la sensación del tubo invadiendo mi interior, me concentre en aquel recuerdo.
Ahi estaba mi sobrinito en aquel entonces de 3 años, sentadito en las escaleras con una sonrisita tímida, mirándome de reojo y con su pronunciación aun "bebesca" susurrando: "tía Nefer... ... ... me cargas?" , ... sentí un pellizquito en mi corazón, ante aquel caramelito, me agache extendiendo los brazos y mientras lo cargaba, me abrazo tiernamente y puso su cabecita recostada en mi hombro derecho.
Horas después, desperté en la habitación del hospital y vi al faraón a mi lado, esperando pacientemente a que el efecto de aquella droga pasara.
Enfermera: mira quien esta despertando
Faraón: mi amor? (mientras tomaba amorosamente una de mis manos)
Nefer a enfermera: quién es este tío?
Faraon - cara de consternación -
Enfermera a Faraon: no se preocupe, esta bromeando
Nefer aun aturdida por la anestesia: jajaja caiste
.-.-.-.
Salí a comer, extrañamente hoy las horas volaron y la hora de la comida estaba pisándome los talones. Fui a la oficina de sancho panza (oficina de enfrente) y no estaba... pero me distrajo la pantalla de su laptop cuando leí el nombre del archivo en el margen superior izquierdo de la pantalla con letras negrillas y gigantes "evaluación anual de Nefer". Asegurándome de que nadie estaba rondando por ahi, pues se me fueron unos minutos de más y ya la gente se había ido por su lunch, la adrenalina comenzó a correr por mis venas... ** que demonios estoy haciendo** di click para imprimir, direccionando a la impresora del pasillo, deje el archivo como estaba, asegurándome de volver a direccionarlo a su impresora... corrí al pasillo y recogí mi evaluación.
Salgo despavorida hacia el coche y mientras arranco y me dirijo al depa, voy leyendo... ... ... ...
Diantres! no esta actualizada, es la misma del año pasado...
La p.h. me comenzó a invadir con pensamientos neuróticos y amenazantes. Tengo la maldita costumbre de carburarme sola e imaginarme lo peor. Después de leídos los papeles, quede con una sensación de estupidez infinita y me sentí acongojada por el verdadero resultado de mi evaluación de este año, todavía sin plasmar en aquel formato (ya que mi relación con el guajo este año no fue muy buena que digamos).
La adrenalina no dejó de correr por mis venas mientras comía, así que para distraerme puse la televisión, viendo alguna telenovela gringa mientras ingería sin pensar unas salchichas de pollo con tabuli y un pan árabe. Hasta olvidé comerme mis verduritas y mi fruta. Traté de utilizar técnicas de relajación, inútiles hasta el momento. Dio la hora, salí al coche, puse mi escándalo con las ventanas cerradas para aturdirme un poco y ahuyentar los malos pensamientos... cuando recordé de nuevo la dichosa "dimension del amor"...
... ... ...
"tia Nefer... ... ... me cargas"?
... ... ...
No cabe duda que ese pinguito es infalible.

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