Esta mañana decidí algo que no hacía desde hace añales, llevé mi pequeña combo-box al "tocador" y mientras me duchaba, bailaba al ritmo de depeche mode. No sé por qué últimamente he estado demasiado nostálgica por la música ochentera y noventera.
Ayer en la tarde fui de traviesa a comprarme unos videos de danza jazz, así que espero mover el esqueleto todo el fin de semana a ver si así quemo las lonjas que me quedan.
Espero que el faraón se anime y me acompañe.
Después de semejantes represiones en la juventud (cálmate, ni que estuvieras tan ruca), sigo en la oleada de rebelión, pero lo peor del caso es que terminé en un país en el que la libertad es sólo un sueño. Recuerdo cuando estaba en Mexico, ponía mi escándalo y bailaba como dice la canción de Mateos, con mi sombra en la pared, hasta altas horas de la noche, sin que vecino alguno hiciera el intento de rebuznar.
Llegaba mi mamá de su negocio y nos hacía segunda bailando hasta altas horas de la noche. Almas libres, energéticas, quemando calorías, sueños, yo creo que hasta entrábamos en trance.
Con lo que no me he podido conformar: usar los audífonos para aturdirme en la soledad, es mejor compartir la buena música y los "moves" con alguien que esté dispuesto a que le venga gorro todo.
Aquí en el país de la libertad, tiene uno que andarse cuidando de todo y de todos. No basta con la discriminación racial, aunque uno se vea "deslavadón", abre uno la boca, y al notar que uno no es 100% gabacho, te tratan con desprecio y bueno, no faltan los hipócritas que parecen amables pero por la espalda le dan a uno la puñalada. Tal vez porque estoy en el lugar equivocado, al que le llaman "el cinturón de la biblia", que ya se imaginarán.
Tengo que conformarme con poner mi música a cierto volúmen, y si se me ocurre hacer alguna mensada, como acostumbraba antes, simplemente espontáneamente hacer el ridículo medio bailando por ahí... La gente no tiene absolutamente nada que hacer y se la pasan fregando al prójimo. Ahora entiendo el índice tan alto de adicciones y suicidios en este país.
Lo único que me consuela es que, apesar de que el faraón es nativo de esta nación, tiene una mente abierta, comprende y tolera mis loqueras.
Aún así, entre semana tengo que cerrarme en mi burbuja y limitarme a seguir conversando internamente con Nefer.
Llegó al fin, el tan ansiado viernes, después de unos días a la deriva, por fin estaré en casa. Espero disfrutar mucho éstos 2.5 días.
Paz...
1 comentario:
allá son mojigatos de closet, creo que es peor que los mexicanos que son mojigatos conocidos. buenos dias Nefer, dale un madrazo a tus compañeros mamones (de trabajo, claro).
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