Páginas

domingo, julio 27, 2008

Tu palomita

¿Sabes? hoy me desperté muy triste... y la verdad no sabía por qué, traté de agradecer lo que tengo, deambulando por casa, observaba por la ventana los árboles. Como sonámbula, desesperanzada. Me dije una vez más que no me voy a permitir sentirme así. Tomé un tazón y me serví cereal. "Tengo que llamarle a mamá", brotó en mi mente... "al rato..." yo misma me contesté...

Me puse a ver la película "la vida es bella"... qué ironía.

Te me viniste a la mente, "siempre estaremos conectadas"... una vez más me dije que llamaría a mamá. Recordé que mi celular no tiene pila y maldita sea, la flojera y desgano logró que olvidara conectar el teléfono.

Aburrida, mientras el que vive conmigo limpiaba la cocina, me puse a ver alguna otra, ésta vez una verdaderamente fea. Hastiada, al final, apagué la televisión. Bajé al sótano. Leía noticias de farándula, cuando sonó el teléfono:

"Malas noticias mijita... ..." con eso tuve para entender el por qué me sentía tan ... tan... no encuentro ni siquiera un adjetivo para describir este malestar del alma... como que ya lo sabía y sólo faltaba confirmarlo. ¿Por qué, si ya estabas tan bien? ...

Diablos, y yo tan lejos. Mamá me implora que no vaya a tu funeral. Estoy totalmente desarmada, impotente. Debí haber ido y no hacerle caso a mamá hace casi un mes...

Pero bueno. Dirán que ya estabas muy grande -aunque tenías mucha fuerza-, que ya "descansaste"... y ¿ellos qué saben? si tú no estabas cansada. De hecho, esta mañana le pediste a mamá que te sacara de ahí. Sólo que tu cuerpecito delator y necio, le pidió a tu corazón que estuviera quieto... Dice mamá que te fuiste sin darte cuenta.

Si de por si siempre te extraño, tenía la esperanza de verte cada año. Ahora, estoy hueca, completamente vacía. Ya no tendré tu consejo, ni tu lectura de alfileres, ni tus "te quiero palomita", ni tus "¿te acuerdas mijita?", tu perfume rico, tus manos temblorosas y dulces.

Recuerdo bien cuando sujeté por última vez aquella cabecita ya casi calva. Tus cabellos plateados, tus enormes ojos y pestañas largas, a través de los gordos cristales de tus anteojos... te tomé de la nuca, te miré a los ojos y te dije "te quiero mucho mi abuelita consentida"... "ay mijita, eres mi alegría", siempre contestabas, con tu enorme sonrisa.

Te digo que no me gustan los días nones.

Mi abuelita yeyé, mi confidente, mi alcahueta, mi dulce viejecita... contigo se va mi alma y me quedo con un dolor muy grande, un hueco enorme. Te quiero mucho abuelita, como siempre.

Tu palomita.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Desde aqui lo siento mucho.
Las perdidas nunca han sido faciles, y menos de personas tan unidas a nosotros.
Fuerza y cariño.

babik dijo...

mi solidaridad con usted, sabemos cuanto duele, una oración para su abuelita.

Space Panda dijo...

ninguna frase es la adecuada en estos casos... lo siento mucho, desde aqui un abrazo bien fuerte y una oracion por tu abue, por toda la familia y por ti...

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...