Sí, aquellos viernes en los que nos apurábamos a salir de la oficina para dirigirnos en el mísero tráfico al punto de reunión. Buscando estacionamiento y finalmente llegando al lugar.
Los lugares estaban semi-llenos y entre aquél barullo en aquella mesa, contábamos chistes, viboreábamos, recordábamos, cantábamos... bailábamos... sí, aquellos viernes en los que disfrutaba de los amigos y aunque no era de mi gusto el alcohol, me sumaba a los brindis y a veces hasta ponerme hasta las manitas con singular alegría... música del momento, retro de los 80's bailando hasta el deshidrate y hasta que las piernas acalambradas pedían a gritos irnos a sentar... a veces hasta lugares bohemios, las peñas... etc...
"Lentamente... soy un espia unespectador, y el ventilador desgarrandote, se que te excita pensar hasta donde llegare..."
Uno no se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde. Extraño horrores el ambiente pachanguero mexicano, en el que puedes deschongarte sin importar lo que digan los demás, que puedes tener tu escándalo en tu casa sin que te manden a la policía, relajarte a tus anchas al son de la música y de los amigos, el ligue con el galán en turno, etc.
Tal vez no termino de "madurar" a lo que diría la gente de mi edad... pero sabes qué? me vale sorbete, nací con la música en la sangre, me encanta bailar, cantar en la regadera con mi música para despertarme, disfrutar de mi ridículo frente al espejo... uuh uhh uuuuhhh es por amor, que uno hace lo que siente... y por amoooor yo sigo y sigo aunque me cueste... y al costado del caminoooo, veeo veeo ángeles caídossss... hay una fiesta y es esta noche.... bababaila conmigo!!! a ti te pido uhhh uhhh uhhh mírame... mira ya mírame... uhhh uhhh uhhhhh...
Mi escandalito en mi oficina que sólo se oye en el interior, pues en el pasillo no molesta a nadie y aún así, pasan mirándome con cara de idiotas... sí, la envidia que tienen de que yo sí me sé divertir aún mientras trabajo... güeros desabridos hasta para eso... ni sus películas hollywoodenses reflejan su verdadera vida de aburrimiento y rutina... ni su comida, ni sus gimnasios, sus ejercicios aeróbicos que más bien llamaría robóticos, se mueven por mover, por quemar sus grasotas, las caras de palo y los chorros de agua escurriendo de su sucios cuerpos... no ése espíritu latino del que disfruté en los gimnasios mexicanos a los que pertenecí, en los que el agregar el bailecito a la rutina era toda una pachanga, un gozo...
Ni siquiera un antro en este maldito pueblo, ni siquiera para los universitarios... pues qué hacen????????? me pregunto yo, sus trillados partidos de americano, basket, golf (puag)... AGUADOS!!!!!
Será que soy de otro planeta???? o tal vez me he impuesto un severo auto-castigo al vivir en este lugar, lejos de todo y de todos...
Y como diría aquella trillada canción de Maná... ME VALE VALE VALE...
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