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miércoles, agosto 31, 2011

Al menos...

*** deliberadamente sin tildes ***

...no estoy loca, no soy la unica que se hace la misma pregunta. Despues de la iluminacion, que sigue? que sentido tiene la "vida ilusoria"?... encontre un buen articulo al respecto y me ha tranquilizado.

Me parece una idea excelente la de crear como todo un artista, cada dia... un dia maravilloso... en lugar de vivir como en la pelicula de la marmota...

Tendre que enfocarme en los pincelazos de la nueva creacion y mientras tanto, ocuparme de pegar ojo que se me ha hecho costumbre otra vez el desvelarme... que no me hace nada bien.

martes, agosto 30, 2011

domingo, agosto 28, 2011

Nirvāṇa

Anoche, alrededor de las once treinta y tantos, alcancé la iluminación. Tal vez después postée o trate de verbalizar lo que me fue revelado. Anoté lo más que pude, pero no creo que sea ni la tercera parte de lo que vi.

Nada importa :)

lunes, agosto 22, 2011

Lunes indeseado

Siempre me han impuesto los domingos. No me gustan. Peor los lunes, sobre todo cuando sé que mi porvenir depende de lo que yo decida hacer. Decidí no llamar a aquella mujer que quiere que trabaje como consultora. No lo sé, como que por ahí no me late. Tal vez cambie de idea y mañana la llame. Hoy tenía muchas cosas que hacer: llamar a la compañía de autos para hacer cita para el servicio del nefermovil. Averiguar si mi membresía en esa asociación profesional sigue vigente, para.... -si... ya sé...- registrarme para la certificación, aquella a la que le he dado la vuelta.

Aunque no hice lo mencionado, me desperté relativamente temprano, hice Tai Chi... un DVD que encontré abandonado por ahí... para seguir con mi rutina de la serpiente.

Confieso que no he comido muy bien que digamos, la semana pasada no comí verduras y mis entrañas lo resintieron. Están protestando estirándose como chicle en el interior, haciéndome pasar unos momentos sumamente incómodos.

Vino el de la compañía de internet. Cambió no se qué cosas o filtros fuera de la casa y en el sótano. Así que antes de que llegara, me di a la tarea de escombrar y aspirar aquél área que le rehuía. Sí, todavía hay cajas y papeles, pero ya menos, tal vez mañana le dé otras dos horas a la talacha allá abajo. Poco a poco y quizás para el viernes el sótano esté impecable. Al menos el internet dejará de fallar (ojalá).

Malas noticias: encontré una cucaracha bebé en el sótano. Así que esto tiene que quedar esta semana, ojalá sólo sea una pasajera y que no se estén colando por la coladera del área de máquinas.

Me siento triste. Triste porque perdí contacto con un amigo muy querido, con el que podía hablar horas y de diversos temas, trabajábamos hasta altas horas de la noche, viajábamos juntos, negreábamos juntos, mentábamos mandarinas juntos, etc. El caso es que le perdí la pista.

El no es muy asiduo de las computadoras. Nunca escribía correos, pero hablábamos por teléfono o cuando iba a México, nos quedábamos de ver para el café. La última vez que lo vi fue en el otoño del 2007. La última vez que escuché su voz fue en el otoño del 2008. Aquél otoño hablé con él mientras la anestesia general iba poco a poco disipándose en mi ajetreado cuerpo tras aquella cirugía. Después... perdimos contacto. Su teléfono no es el mismo y al parecer ya no vive donde solía hacerlo.

Cuando pasó lo de mamá, traté de buscarlo... sin suerte. El había conocido a mamá... de las tantas veces que me llevó a casa después del trabajo. El y su esposa conocieron a mamá en una situación curiosa muchos años atrás. El había dado al hospital y yo también por circunstancias diferentes. Nos encontramos en urgencias. El esperaba ser atendido, sentado con su esposa e hijas. Yo, sentada con mamá. En aquél entonces era sólo un compañero más de trabajo, no nos conocíamos del todo y sobrevivíamos al difícil ambiente laboral de aquella empresa.

Hace un par de meses, sabiendo que nunca abre sus correos, le escribí una carta y se la envié por correo convencional, pero con acuse de recibo. Así me aseguraría que recibía las malas nuevas sobre mamá. El sábado, recibí del correo una notificación para recoger un sobre.

Hoy fui a la oficina postal y para mi tristeza, aquél sobre sellado y estampado llegó de nuevo a mis manos. Cerrado. Unas notas en español por todas partes en aquél sello: "no se encontró al destinatario". Al parecer hicieron un par de visitas, para en la tercera (la vencida), sellaron el sobre como "devolución de acuerdo a la ley" y lo enviaron de regreso.

Cometí el grave error de abrir ese sobre y leer su contenido. Fue como revivir de nuevo todo aquello. Todos esos meses de angustia y terror, confrontarme con la muerte una vez más... sentir este vacío infinito que corroe todo mi ser. Recordar sus bellos ojos a media asta. Su aliento ausente después de una expiración. Un envase vacío. Un cuerpo sin alma. Una familia sin madre. Una hija perdida en un llanto ahogado... sin poder respirar. Respiro profundo y en mi mente sólo un par de frases: no principio, no fin... no nacimiento, no muerte. Tal vez es un consuelo. Al menos, quiero engañarme un ratito, hasta que este dolor que me taladra el pecho ceda.

domingo, agosto 21, 2011

Ventanas

Me encontraba en una habitación en penumbras, el faraón  yo estábamos de pie charlando... cuando a lo lejos se escuchaban ruidos... después se iban acercando. Una silueta se veía através de la ventana... y unos golpes sordos sobre las ventanas... como si un ánima tratase de materializar el toquido pero apenas rozase el cristal "Nefer?!, Nefertiti Totonaca?!"... La voz de mamá...

Desperté y el faraón dormía, junto con aquella grabación de hipnosis para poderse mantener en sueño.

Tomé mi almohada y me mudé a la otra habitación... aquella grabación aturdía hasta el tuétano.

jueves, agosto 18, 2011

Bomba

Me encontraba en un humilde rancho, la sequía se dejaba ver en sus tierras. Habían dos cabañas separadas por metros y metros de campo seco. Mi tarea era llevarle jabón para cabello y cuerpo a un grupo de personas para que lograran bañarse. Todo era a escondidas. Salía de la primera casa, corriendo de puntillas para no ser notada. Recorría parte de aquél campo seco y me dirigía hacia el centro del pueblo. En el camino, una señora me advertía "no vaya señorita, está muy peligroso, matan gente".

Cambiaba mi rumbo... Llegaba a la otra casa. Entraba a un baño principal, que para mi sorpresa tenía artículos de lujo: un tapete persa sobre aquél azulejo. El tapete tenía una figura... mientras recorría aquél baño, notaba su amplitud. La figura era la Meca.

En ése momento, me había dado cuenta de que estábamos en tierra peligrosa. Recorro aquella cortina para sacar los jabones. Entra un hombre con turbante. Me escondo en la regadera. Tomo lo que puedo, como puedo y mientras se descuida, salgo corriendo hacia la otra cabaña.

Me toma mucho tiempo, llego al otro lado, cuando la peque me pregunta por qué tardé tanto. Sin poder explicarle todo lo que vi, me percato de que no tengo el jabón. Olvidamos el baño, me avisa la peque que nos tenemos que ir, que habrá una detonación. Esto último, me lo avisa de forma telepática mientras señala una manada de diversos animales que se dirigían hacia un granero. "Hay que ir detrás de los animales, ellos van hacia la salvación, no hay tiempo que perder". Ella ya había organizado el plan, todos correríamos en cuclillas hasta el granero, mezclándonos entre cabras, borregos, vacas y otro tipo de ganado.

Se abrían las puertas del granero y había una enorme prensa. Los animales aterrados observaban y automáticamente desviaban su destino. La peque gritaba: "atrás!!! va a explotar, vámonos!!!". Corriendo lo más rápido que podíamos, nos alejábamos de aquél lugar, una detonación estaba por ocurrir.

Una onda expansiva nos suspendía en el aire mientras una luz nos cegaba. Desperté segundos antes del despertador.

Hoy me tocaba temprano ir al especialista del tobillo. Al parecer estoy al 90%. Tal vez en cuatro semanas más, esté lista. Me sugirió seguir con mis ejercicios terapéuticos en casa.

miércoles, agosto 17, 2011

Borracho anónimo

Hoy me la he pasado de huevona, no hice nada en todo el día más que estar en internet, comer y hacer mis necesidades fisiológicas. Lo sé estimado lector, no tengo para qué dar detalles. Pero sí, si me bañé.

Hace unos minutos, sonó el celular (aleluya que funciona, llegó la nueva pila hace un par de días). Era un tal Stephano. En la pantalla vi el número del faraón, pero la voz era muy distinta y era un gringo intentando hablar en español, me decía con su pobre lengua, que el faraón era un hombre bueno, que no tomaba... que él sin embargo, se había echado unos cuantos tragos. Quiso hablar en italiano, le contesté en italiano y me dijo que no, que hablaba más español que italiano. Para mi forma de escuchar, para mí que ni uno ni otro. Me dio risa, le dije que mucho gusto y me pasó al faraón.

Resulta que es compañero suyo de trabajo, se puso "pedo" (suena muy feo, pero no hallo otro sinónimo que supere al de borracho) y apenas es miércoles. Están todos en alguna ciudad lejana haciendo una auditoria. Tienen que regresar a la oficina después de la cena y el tío no promete, pues al parecer ni conducir puede. En fin, me imagino que su auditoria será de lo más feliz.

Esta entrada, de lo más inútil. Sólo para plasmar el jocoso e inesperado momento.