No hallo palabras para describir este post... son las letras desparramadas de una mente extraviada, con un cuerpo vacío y un alma dolorida.
Este ser perdió toda estructura, toda ilusión, todo sueño. No hay interés alguno, los días pasan y se pierden en el abismo de la nada.
Se le podría culpar a la cojera temporal, a la falta de movimiento corporal, al desempleo, a la tristeza, al vacío. Pero no existe excusa alguna. Sólo una tremenda apatía que se cuaja como una gelatina densa en el frigorífico.
No sólo es la apatía, sino el envase que contiene a esta alma. Este envase que se empeña en jugar inmaduras rencillas para ocasionar problemas. Podría recordar que tendría que haber armonía, mente-cuerpo-espíritu. La mente está de holgazana perdiéndose en cuanta estulticia encuentra para no pensar, el cuerpo protesta y el espíritu ya ni llora... sólo se contonea al vaivén del diminuto oleaje de un movimiento casi nulo.
Es un triángulo que no tiene nombre, una trinidad desatendida, desconectada.
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3 comentarios:
:(
Hola, Nefer, el planeta se esta expandiendo y nosotros junto con el, la apatía es parte del cambio, es como un barco sin timón, pero es pasajero,es una limpieza que será desde el interior de cada quién, ánimo! Saludos, con cariño, Tatvatah.
Gracias Tattvatah... sé que es pasajero pero ya se está prolongando demasiado...
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